La OMS y la ONU piden prohibir venta de animales silvestres para consumo
Con el fin de reducir los riesgos para la salud pública, la ONU a través de su Programa de Medio Ambiente y Organización Mundial de la Salud pide a los gobiernos del mundo que prohíba la venta de animales silvestres para consumo en mercados para evitar nuevas enfermedades.
Para alcanzar dichos objetivos publicaron una guía en la que han establecido directrices que consideran los gobiernos deberían adoptar inmediatamente para garantizar la seguridad del sistema alimentario mundial.
LLAMAN A LA PROHIBICIÓN: El llamamiento, en conjunto con el Programa de Medio Ambiente de la ONU y la Organización Mundial de Sanidad Animal, está dirigido a que las autoridades competentes en cada país tomen acciones como medida de emergencia para suspender el comercio de animales mamíferos silvestres vivos con fines de consumo o cría. De igual manera, recomiendan la clausura de locales dentro de mercados que incurran en dicha actividad.
El motivo de esta acción es que la mayoría de las enfermedades infecciosas en humanos son de origen animal: “Los animales, especialmente los salvajes, son la fuente de más del 70% de todas las enfermedades infecciosas emergentes en humanos, muchas de las cuales son causadas por virus”, indica la guía.
IGUALDAD ANIMAL SOLICITÓ LA PROHIBICIÓN HACE UN AÑO: En abril de 2020, Igualdad Animal lanzó una campaña mundial en la cual recogió más de medio millón de firmas para pedir a la ONU que prohibiera los mercados húmedos de animales vivos en todo el mundo. Es en estos mercados donde se originaron enfermedades como el SARS, y donde los científicos creen que comenzó el COVID-19 y, como lo revelaron investigaciones realizadas por la organización en mercados de China, Vietnam e India, esos lugares no solo representan una amenaza para la salud humana sino que son increíblemente crueles con los animales.
Las imágenes exclusivas publicadas por Igualdad Animal muestran a animales como ciervos, mapaches, cocodrilos y perros viviendo encerrados en jaulas entre otros animales de otras especies y sobre la inmundicia, sufriendo deshidratación, hambre y enfermedades.
LO QUE ESTÁN DICIENDO: “Cuando los animales silvestres se mantienen en jaulas o corrales, se matan y se muestran en zonas abiertas del mercado, estas contaminan con fluidos corporales, heces y otros desechos, aumenta el riesgo de transmisión de patógenos a trabajadores y clientes y, potencialmente, a otros animales del mercado. Estos entornos ofrecen la oportunidad de que los virus animales incluyendo los coronavirus, se amplifiquen y se transmitan a nuevos huéspedes, incluidos los seres humanos”.
“A nivel mundial, los mercados tradicionales tienen un papel central a la hora de proporcionar alimentos y medios de subsistencia a millones de personas. Prohibir la venta de estos productos puede proteger la salud de los trabajadores del mercado y de los compradores.”
NECESITAMOS IR MÁS ALLÁ: Desde que el COVID-19 transformó al mundo mucho se ha hablado sobre los riesgos que conlleva el consumo de animales silvestres pero poco se ha hablado sobre los riesgos a la salud humana que derivan del consumo de carne de animales que se está produciendo en nuestros propios países.
Las enfermedades zoonóticas se suelen atribuir al consumo de animales silvestres, pero lo cierto es que vivimos constantemente bajo la amenaza de brotes de enfermedades que pueden derivar en pandemias y que tienen su origen en los animales más comúnmente consumidos también en México.
EL PELIGRO EN MÉXICO: Los rastros clandestinos y mercados en los que también se venden y matan animales para consumo con la intención de asegurar la venta de carne fresca, han sido igualmente asociados con la aparición de nuevas enfermedades zoonóticas y por eso plantean graves riesgos para la salud pública.
En los mercados de animales iguanas, tortugas, sapos, lagartos, serpientes, monos, leones, venados y ranas, entre otros, son hacinados, vendidos y matados en mercados junto a animales comúnmente más consumidos como cerdos, pollos, vacas y becerros, borregos y guajolotes, implicando severos riesgos sanitarios.
Igualdad Animal documentó la actividad de rastros clandestinos y de traspatio y casas de matanzas en México y los hallazgos de la investigación sacaron a la luz que en estos lugares los animales son matados brutalmente y sufren largas agonías y operan en total incumplimiento de las Normas Oficiales Mexicanas e impunidad por parte de las autoridades encargadas de regular su operación y hacer cumplir las normas.
¿QUÉ ESTAMOS HACIENDO EN MÉXICO?: Antes estos riesgos, Igualdad Animal presentó una iniciativa de ley que busca prohibir los lugares destinados a la matanza y venta de animales que no cuenten con las medidas sanitarias necesarias o representen un riesgo epidemiológico.
Los principales puntos de esta iniciativa son:
- Se plantea la reforma de la Ley General de Salud para considerar la matanza de animales en vía pública como un delito especial;
- Se busca la reforma al Código Penal Federal para que quien comercialice alimentos, sustancias o animales que por falta de higiene o cumplimiento de normas zoosanitarias representen un riesgo para la salud humana, sea sancionado;
- Se pretende aplicar una pena privativa de libertad a quien opere un rastro clandestino.
¿CÓMO PUEDES AYUDAR?: Al firmar en nuestra petición por el cierre de los mercados húmedos del mundo estarás apoyando la petición que afecta a todos los animales que son vendidos vivos y matados en los mercados.