Nuevas generaciones cambiando la industria alimenticia
La industria alimenticia se ve desafiada por las generaciones más jóvenes que quieren conocer más del origen de sus alimentos. Están cuestionando, además de los factores tradicionales como costo, conveniencia y sabor, aspectos como trazabilidad, calidad de los ingredientes, las prácticas de producción, la sustentabilidad del empaque, el desperdicio de alimentos, el trato que se brinda a colaboradores y, por supuesto, las buenas prácticas de bienestar animal.
Se prevé que para 2027 la generación Z (nacida entre 1998 y 2016) representará un 28% de la población global, combinada con los millennials (nacidos entre 1981 y 1997) que representan el 52% de la población mundial. Son ellos los que están seleccionando marcas y empresas basándose en la responsabilidad que tienen ante la sociedad y la posibilidad de tener un impacto positivo en el mundo.
Las compañías de alimentos necesitan prepararse para crear y adoptar una nueva relación con sus clientes, generar confianza, reconocer y abordar positivamente sus preocupaciones, ya que este momento puede ser una oportunidad para las empresas y no un obstáculo.
Las empresas deben crear un propósito más allá del concepto de responsabilidad social, ya que se han convertido en actores políticos y sociales siendo más influyentes que los gobiernos, siendo un foco de demandas sociales. Las empresas tienen la oportunidad de hacer del propósito un negocio, en conjunto con los valores y necesidades de sus clientes.