La necesidad de una Ley General de Protección Animal en México
En 2024, por fin, todos los estados de la República lograron tener una ley de protección animal. Esto significa que, en cada uno de ellos, los Congresos han respondido a las exigencias de la sociedad para proteger a los animales y para regular las diferentes conductas del ser humano con el fin de prevenir prevenir la crueldad y procurar el bienestar.
Cada estado decide a cuáles especies proteger y de qué manera, provocando un cuidado diferente a lo largo del país, por ejemplo, Hidalgo, Colima y Oaxaca son las únicas que protegen a los millones de animales en granja que son usados para consumo humano, gracias al trabajo de Igualdad Animal.
Te preguntarás, si ya existen tantas leyes, ¿por qué es necesaria una Ley General de Protección Animal?
Antes, es necesario entender qué características tiene una ley general, como por ejemplo, que es obligatoria y distribuye competencias para los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal). También establece bases y puede determinar que hay cuestiones que sólo se describen en la ley general como plazos, procedimientos de denuncia y otros aspectos procesales para dejar a las entidades todo aquello que ésta no contemple.
De esta manera, las leyes locales, como las que ya existen, sólo podrán ser mejoradas, pero nunca retroceder a lo establecido en la general.
¿Para qué una Ley General de Protección Animal?
Sabiendo esto, veamos qué oportunidades nos da una Ley General para los animales.
Primero, para garantizar que todas las especies cuenten con protección.
No todas las leyes locales incluyen a todas las especies, como te contaba, la mayoría de ellas no mencionan nada para los millones de cerdos, vacas, pollos y gallinas que son explotados para consumo humano, lo cual los deja sumamente vulnerables, esto puede contrarrestarse incluyendo un capítulo de bienestar en la ley general.
Segundo, para mejorar la protección de todos los animales.
Que la protección es desigual no sólo se debe a que dejan fuera a algunas especies sino porque en algunas entidades se regulan mejor las actividades o se prohíben más actos de crueldad.
Si, por ejemplo, en una entidad se menciona que los animales usados para trabajo deben ser alimentados y no sobreexplotados pero en la ley general se menciona que se les deben dar ciertas horas de descanso, atención médica y no usarlos cuando estén enfermos, entonces la ley local deberá adaptarse para ampliar la protección, ¡y esto es súper importante!
Tercero, dar poder a las autoridades de todos los niveles de gobierno para actuar.
Una característica de las leyes generales es que distribuye lo que cada nivel de gobierno debe hacer, en este caso, para proteger a los animales. Eso significa que, cuando la ley sea vigente, las autoridades federales, estatales, municipales y de las demarcaciones territoriales tendrán que actuar de forma coordinada, si es necesario.
¡Tú puedes ayudar a conseguir esta Ley General de Protección Animal!
Lograr una ley que priorice a los animales será posible si como sociedad civil nos unimos para exigir y vigilar que las y los legisladores cumplan con esta demanda ciudadana. Firma hoy por la primera Ley General de Protección Animal.
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